miércoles, 18 de noviembre de 2009

* EnTrEtEnCiOn De lOs NiÑoS



JuEgOs InFaNtIlEs

Los diferentes tipos de juegos infantiles que conocimos durante nuestra niñez y que ahora tenemos olvidados en la memoria lejana tenían un sentido, la mayoría de las veces didáctico y fueron creados por expertos en pedagogía infantil.
El juego espontáneo favorece en el niño el proceso hacia una madurez, además de darle herramientas para el pensamiento creativo; es por medio de los juegos que los niños aprenden el funcionamiento de las cosas, aprenden reglas y cuando se trata de juegos infantiles en grupo, aprenden a socializar y a pertenecer sanamente a un grupo definido.
Los juegos infantiles tradicionales y los que se han inventado más recientemente, desarrollan en el niño el sentido de la realidad; debido a que está acostumbrado a vivir en un mundo de adultos, por medio del juego puede ir creando y recreando un universo propio, lleno de simbolismos, adaptando el mundo a su propio lenguaje. Tenemos por ejemplo los juegos infantiles de patio o los que están relacionados con alguna práctica deportiva, que establecen parte del pensamiento formal y de la concentración; también podemos ver los juegos infantiles de pc o de cualquier consola, que favorecen la parte sensora - motriz y establecen parámetros de realidad y ficción.
En los niños más pequeños, los juegos de imitación sientan las bases intelectuales y de concentración que se tendrán más adelante, en la etapa escolar; la carencia de este tipo de actividades puede generar problemas futuros, como dislexia o afasia. También es importante anotar que por medio de cualquier tipo de juego, en el que se realicen actividades compartidas el niño está creando lo que será su personalidad futura; problemas como la envidia, los celos y las tendencias a ser solitarios se pueden evitar permitiendo el contacto directo entre niños de la misma edad y no coartando sus posiblidades propias de crear historias con argumentos que para los adultos, tal vez sean inexplicables; el momento en que a un niño, por ejemplo, no se le permite llegar a la culminación de un juego se le está privando de la capacidad de crear por sí mismo.
En síntesis, el juego no solo es una actividad recreativa, sienta los precedentes para una madurez sana y una conducta social óptima; el niño aprende en su edad temprana la asimilación, la comprensión y la adaptación a una realidad a la que tiene que acostumbrarse, por lo tanto es deber del adulto no solo permitir, sino fomentar los juegos infantiles, sobre todo si son en grupo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario